miércoles, octubre 29, 2008

Sobre la muerte... según Epicuro


20. No hay que temer a la muerte

"Acostúmbrate a considerar que la muerte no es nada para nosotros, puesto que todo bien y todo mal están en la sensación y la muerte es pérdida de la sensación".

(Epicuro, Carta a Meneceo).

--- Díganle a Don Ramirito y su Flor ---

"Es un necio el que dice que teme la muerte, no porque haga sufrir al presentarse, sino porque hace sufrir en su espera: en efecto, lo que no inquieta cuando se presenta es absurdo que nos haga sufrir en su espera".

(Epicuro, Carta a Meneceo).

"El recto conocimiento de que la muerte nada es para nosotros hace dichosa la mortalidad de la vida, no porque añada un tiempo infinito, sino porque elimina el ansia de inmortalidad. Nada temible, en efecto, hay en el vivir para quien ha comprendido que nada temible hay en el no vivir".

(Epicuro, Carta a Meneceo, 124, 125).

"¿Qué ganas con preocuparte por la muerte? No puedes hacer nada; más vale vivir lo mejor posible y no pensar en eso: a menudo hace más daño el temor de morir que la muerte".

(Epicuro, Carta a Meneceo, 125).

"La muerte es insensible. La muerte no afecta a los vivos ni a los muertos; no existe para aquéllos, y éstos no existen para ella".

(Epicuro, Carta a Meneceo, 128).

"Así pues, el más estremecedor de los males, la muerte, no es nada para nosotros, ya que mientras nosotros somos, la muerte no está presente y cuando la muerte está presente, entonces nosotros no somos".

(Epicuro, Carta a Meneceo).

21. Cuando el cuerpo muere, también el alma muere.

"Cuando se disgrega todo el organismo, el alma se dispersa y ya no conserva las mismas facultades ni se mueve, de modo que tampoco posee sensibilidad".

(Epicuro, Carta a Heródoto, 65,66).