domingo, diciembre 24, 2006

El Pico Della Navidad


Es un fragmento de su "Discurso sobre la Dignidad del Hombre", publicado cerca de la navidad de 1486, hace 580 (quinientos ochenta y seis ) años atrás, hago mías sus deseos y esperanzas. 

El habla en el fondo de la sabiduría, de la filosofía, de la verdad... 


"...nos mostrará la vía hacia la paz y nos servirá de guía, y ésta, viéndonos llegar, de lejos nos gritará: «Venid a mí, vosotros que estáis cansados. Venid y os restauraré. Venid a mí y os otorgaré la paz que no pueden daros el mundo ni la naturaleza». 


Y así, respondiendo a esos suaves llamados, tan benignamente invitados, con los alados pies de Mercurio, volaremos hacia los brazos de la beatísima madre, y allí, de la ansiada paz gozaremos; paz santísima, unión eterna, amistad concordante por la cual todos los seres animados no sólo coinciden en esa Mente celestial y única que está por encima de toda mente, sino que además, de un modo sublime se confunden en uno sólo. Esta es la forma de amistad que los pitagóricos llamaron el propósito de toda filosofía. Esta es la paz que Dios predica en su morada y que permite a los ángeles descender a la Tierra y anunciar a los hombres de buena voluntad para que también ellos, los hombres, asciendan al cielo por ella y se vuelvan ángeles. 

Auguremos, por lo tanto, esta paz a los amigos. Auguremos también esta paz a nuestro siglo. Fomentemos su prédica en todos nuestros actos, invoquémosla para nuestra alma, ..." 


Pico Della Miràndola 

sábado, diciembre 23, 2006



Maldición contra Baruch Spinoza


http://es.wikipedia.org/wiki/Imagen:Spinoza.jpg



Excomulgamos, maldecimos y separamos a Baruch de Espinoza

con el consentimiento de Dios bendito

y con el de toda esta comunidad,

delante de estos libros de la Ley,

que contienen trescientos trece preceptos;

la excomunión que Josué lanzó sobre Jericó,

la maldición que Elías profirió contra los niños

y todas las maldiciones escritas en el libro de la ley;

maldito sea de día y maldito sea de noche,

maldito al acostarse y maldito al levantarse,

maldito sea al entrar y al salir;

no quiera el Altísimo perdonarle,

hasta que su furor y su celo abracen a este hombre;

lance sobre él todas las maldiciones escritas en el libro de esta Ley,

borre su nombre de bajo los cielos

y sepárelo, para su desgracia de todas las tribus de Israel,

con todas las maldiciones del firmamento,

escritas en el Libro de la Ley...,


advirtiendo que nadie puede hablarle oralmente ni por escrito,

ni hacerle ningún favor ni estar con él bajo el mismo techo

ni a menos de cuatro codos de él,

ni leer papel hecho o escrito por él.


Acta de excomunión de Spinoza.

Comunidad Hebrea de Amsterdam

Amsterdam, 27 de julio de 1656

jueves, diciembre 21, 2006

Bitácora del Errante

Hoy comienzo a leer sobre Leibniz, un tipo muy viajado, discutidor con Newton, conocido de Spinoza, leído e interpretado en sus pliegues deleuzeanos, analítico y que dejó muchos borradores ambiciosos. Bibliotecario medio loco, y matemático. Pero entonces filosofía, matemáticas, física, y el resto de las ciencias venían dándose a luz mientras desgarraban el vientre de la Gea Iglesia y mataban al Cronos Aristotélico con la castradora guadaña de la Razón.

La razón fue la espada láser de los Jedi del Iluminismo ¡Qué épocas de la República Ilustrada!

Ahora, estamos en manos del Oscuro Imperio posmoderno tras las gélidas guerras comerciales con un único primer mundo que avanza victoriosamente sobre todo el mundo...

¿Todo? No, una pequeña comunidad se resiste hoy y siempre tercamente al sur del Rio Grande...

lunes, diciembre 11, 2006

Ecos Kantianos en Eco

- Adso, resolver un misterio no es como deducir a partir de primeros principios. Y tampoco es como recoger un montón de datos particulares para inferir después una ley general. Equivale más bien a encontrarse con uno, dos o tres datos particulares que al parecer no tienen nada en común, y tratar de imaginar si pueden ser otros tantos casos de una ley general que todavía no se conoce, y que quizá nunca ha sido enunciada (...) La búsqueda de las leyes explicativas, en los hechos naturales, procede por vías tortuosas. Cuando te enfrentas con unos hechos inexplicables, debes tratar de imaginar una serie de leyes generales, que aún no sabes cómo se relacionan con los hechos en cuestión. Hasta que de pronto, al descubrir determinada relación, uno de aquellos razonamientos te parece más convincente que los otros. Entonces tratas de aplicarlo a todos los casos similares, y de utilizarlo para formular previsiones, y descubres que habías acertado. Pero hasta el final no podrás saber qué predicados debes introducir en tu razonamiento, y qué otros debes descartar. Así es como estoy procediendo en el presente caso. Alineo un montón de elementos inconexos, e imagino hipótesis. Pero debo imaginar muchas, y gran parte de ellas son tan absurdas que me daría vergüenza decírtelas (...) Ahora, a propósito de los hechos ocurridos en la abadía, tengo muchas hipótesis atractivas, pero no existe ningún hecho evidente que me permita decir cuál es la mejor. Entonces, para no acabar haciendo el necio, prefiero no empezar haciendo el listo. Déjame pensar un poco más, hasta mañana, al menos.
En aquel momento comprendí cómo razonaba mi maestro, y me pareció que su método tenía poco que ver con el del filósofo que razonaba partiendo de primeros principios, y los modos de cuyo intelecto coinciden casi con los del intelecto divino. Comprendí que, cuando no tenía una respuesta, Guillermo imaginaba una multiplicidad de respuestas posibles, muy distintas unas de otras. Me quedé perplejo.

Y acá vendría Kant diciendo:

En el caso de los juicios sintéticos a priori nos falta esta ayuda enteramente...(la de la experiencia ). ¿En que apoyo y qué es lo que hace posible la síntesis si quiero ir más allá del concepto A para reconocer que otro concepto B se halla ligado al primero, puesto que en este caso no tengo la ventaja de acudir a la experiencia para verlo? Tomemos la proposición:" todo lo que sucede tiene una causa". En el concepto "algo que sucede" pienso, desde luego, una existencia a la que precede un tiempo.......y de tal concepto pueden desprenderse juicios analíticos. Pero el concepto de causa........ indica algo distinto de "lo que sucede"; no está pues contenido en esta última representación. ¿Cómo llego, por tanto, a decir de lo que sucede algo completamente distinto y a reconocer que el concepto de causa pertenece a lo que sucede....aunque no esté contenido en ello?... No puede ser la experiencia, pues el mencionado principio no sólo ha añadido a la primera representación generalidad, sino incluso necesidad... de forma totalmente a priori y a partir de meros conceptos.
Kant. Crítica de la razón pura. Introducción



Y Adso continúa...

- Pero entonces -me atreví a comentar-, aún estáis lejos de la solución...
- Estoy muy cerca, pero no sé de cuál.
- O sea que no tenéis una única respuesta para vuestras preguntas...
- Si la tuviera, Adso, enseñaría teología en París.
- ¿En París siempre tienen la respuesta verdadera?
- Nunca, pero están muy seguros de sus errores.
- ¿Y vos? -dije con infantil impertinencia-. ¿Nunca cometéis errores?
- A menudo -respondió-. Pero en lugar de concebir uno solo, imagino muchos, para no convertirme en el esclavo de ninguno.

domingo, diciembre 03, 2006

De la constancia del Sabio (Frag.) Séneca

"Si pensamos que es libertad el no padecer algo, estamos engañados; lo es el oponer el ánimo a las injurias, y hacerse tal, que espere de sí solo las cosas dignas de gozo, apartando las exteriores por no pasar vida inquieta, temiendo la fisga y las lenguas de todos. Porque, ¿cuál persona hay que no pueda hacer una afrenta, si la puede hacer cada uno? Pero el sabio y el amador de la sabiduría usarán de diferentes remedios. A los imperfectos y que todavía se encaminan a los tribunales públicos, se les debe proponer que su vida ha de ser siempre entre injurias y afrentas, a los que las han esperado, todas las cosas les parecen más tolerables."

Lucio Anneo Séneca - Ciudadano Romano del siglo I

No es que me crea sabio, tal vez si amigo del saber, para vivir un poco mejor, para que vos, el resto y yo también vivamos mejor.
A propósito de las fiestas de fin de año...
A veces nuestra gente más querida nos invita a pasarlas con ellos, con la mejor intención, otras por compromiso social-protocolar, y nosotros vamos por algunas de esas razones y tal vez no queramos estar de fiesta, tal vez no tengamos nada que festejar o no deseemos compartir el festejo o necesitemos analizar y evaluar nuestra vida.
Y si no vamos y realizamos nuestro deseo o seguimos nuestras necesidades de soledad o de compañía íntima... se ofenden incluso hasta la injuria, la maledicencia o el silencio del ostracismo.
O peor aún, participamos y solo somos testigos o cómplices de esas discusiones familiares clásicas. Con resultados similares a veces.


Como dice el romano: "a los que las han esperado, todas las cosas les parecen más tolerables." Entonces, mejor realicemos lo que deseemos y necesitemos, que nosotros, en el fondo, sabemos que necesitamos y es mejor... sólo tenemos que encontrar ese saber. (esto es afín de algunas cosas de los estoicos y Spinoza pero será para otra vez)

PAZ y BIEN